20 marzo 2005

Una Foto en Blanco y Negro

En mi cabeza suena incansable la melodía de "Aquellos Maravillosos Años"... Hoy he hecho algo terrible. He pasado la tarde entre fotos de hace unos añitos. No lo hagais NUNCA, bajo ninguna circunstancia si no estais preparados psicológicamente para el trance.
Hace unos años, la generación jóvenes de los '80 se enfrentaban a sus imágenes de adolescentes, y comprobaban con alivio cómo su gusto y respeto por la estética había mejorado cualitativamente, sobretodo en cuestiones relacionadas con las melenas chamuscadas y las hombreras reposa orejas. Pero nuestra generación Paco Pil, no tiene ese consuelo, y sólo nos queda mirar atrás y comprobar que no sólo nos arreglamos menos que cuando íbamos al instituto, sino que hemos engordado, y nuestra piel está más amarillenta...
Es tremendo...te pasas toda la infancia deseando llegar a la pubertad sin tener el bajo del chándal recogido, ni la goma marcada en el ombligo. Llegas a la adolescencia y coqueteas durante unos años con una talla más que admirable, y eres la envidia en la cola del probador de zara, al que sólo vas para poner los dientes largos a las de más de la 38 porque no puedes pagarte ni una triste falda.
Consigues tu primer currillo, te deja algo de dinero para comprar ropa y te compras lo más hippie y ancho que existe. Y ahí cometes el primer error...En vez de aprovechar tu etapa Paulina Rubio e inflarte a enseñar carnaza, te pones en plan trascendental, comprometida con la industria textil hindú made in Guadalajara.
Poco a poco, vas recuperando tus proporciones de la infancia...te vas inflando de manera sutil, a traición. Empiezas a subir discretamente de la 36 a la 38, 40...pero aunque notas el cambio, piensas que sólo es una mala racha. Si has sido capaz de mantenerte más de un año en la 36, seguro que ese debe ser tu estado natural...segundo error. Te haces fácilmente a la idea del aumento de peso, pero no le das el valor real que tiene y te lo tomas con deportividad. Y entonces te relajas y los kilos empiezan a agarrarse con fuerza a tus lomillos...y esos cuesta cada vez más echarlos. Empiezan los lamentos, las dietas desmotivadas e inconclusas...y en el peor momento: coges las fotos de tu etapa Paulina....
Acabas de cometer el peor error de todos, el error número 3, el definitivo, el que deja constancia de que aquellos días que recordabas a la vuelta de la esquina van quedando en callejones escondidos, a los que es muy difícil volver.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

yo es que siempre me quedé en la 42..eso explica muchas cosas...uff...que bajon!
PD: yo llavo toda la vida en la etapa anti-comercio "made in"...eso tb explica muchas cosas...uff....paro ya

ya....ya...ia....sadiqaki!

22.3.05

 
Anonymous Anónimo said...

ya sadiki, parece mentira ke te kejes cuando mantnerse en la 42 no es malo...es peor pasar x las 36-38-40-42-44...te lo aseguro....me gusta el ekilibrio, y esto no lo es.Animate!

22.3.05

 
Anonymous Anónimo said...

dios mio lo he hecho he mirado las fotos de mi corcho e buscado he comparado y no me ha gustado .Pero me he dado cuenta la de gente que ha pasado y estoy muy satisfecha con la que se ha quedado. Por cierto ese cuaderno de modaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa que lleva mucho en tu poder hay que pasalo ya he??????

28.4.05

 

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