04 abril 2005

...Pásalo...

Este fin de semana la noticia más sonada es la muerte del Papa Juan Pablo II. Cómo cristiana me sorprende enormemente ver a los jóvenes congregados en la colosal Plaza de San Pedro llorando, mandándose SMSs parecidos a los del 14 de marzo del año pasado y que tanta controversia crearon, emplazándose a reunirse con nocturnidad en una plaza cercana a la sede del PP...No aprendemos nada?
Este tema que viene tan unido al de mi anterior entrada, me ha dado que pensar. La muerte, el luto, el Cónclave y el nuevo Papa...De nada serviría que sugieriésemos ideas los cristianos sin mitra, no nos harían caso porque a pesar de lo que dice el Evangelio, nosotros no estamos tan cerca de Dios como cualquiera de los papables. O eso nos han hecho creer desde el comienzo del este negocio. Ahora se podrían abrir las puertas a un nuevo Papa, uno que de verdad fuese el Papa del Pueblo. Uno que analizara de una forma realista los problemas que tiene la Iglesia y en vez de reafirmar las ideas arcaicas que la alejan de las personas de carne y hueso, buscase el cambio que estamos pidiendo a gritos. Nuevas ideas, desterrando las que no son coherentes con la vida de Jesús (tal y como yo la entiendo). El papel de la mujer en la Iglesia necesita una revisión a fondo. No nos basta una enciclíca que hable de la igualdad entre hombre y mujer. Queremos que las mujeres cuenten en la Iglesia tanto como los hombres. El celibato... demos un respiro a los religiosos y religiosas o es que a estas alturas de la historia ¿No puede cada uno elegir como quiere vivir ?
Y lo más importante: el SIDA. Es absurdo y temerario que el único sustento terrenal de la fe de millones de personas les empuje a las relaciones sexuales sin precauciones. El Sida mata y se puede evitar. Los embarazos no deseados pueden acabar configurando una familia que jamás será feliz. Y la castidad...eso simplemente está desfasado con nuestra realidad. Afortunadamente somos muchos los que pensamos que la Iglesia puede decir lo que quiera sobre este tema, que nosotros actuaremos como nos parezca más adecuado.
Como última reivindicación quiero señalar la vergüenza ajena que siento cuando los que manejan el cotarro dan la espalda a los homosexuales, las mujeres maltratadas, y el hambre. Unos por desviados (es que me suena tan absurdo), otras por no ser claramente protegidas a nivel institucional y por el ámparo que durante años han tenido sus verdugos en la Iglesia, y lo último simplemente por el lujo, que nubla la vista cuando se dirige hacia el sur.

5 Comments:

Blogger piradaperdida said...

Estoy totalmente de acuerdo. La Iglesia vaticana todavía sostiene ideas que no se corresponden con lo que piensa la gente de a pie.
Es más, a menudo provocan el rechazo de gente que cree. Es uno de los males que aquejan a la Iglesia ahora mismo. Es cierto que el cambio por el cambio no es bueno, que las instituciones necesitan una línea común, pero en particular en los temas que has expuesto (y en unos cuantos más) me parece que das en la diana.

4.4.05

 
Anonymous Anónimo said...

El Sur nubla siempre la vista a los del Norte, porque por aquí hace tiempo que perdimos el rumbo.Y hay algunos, encerrados en dorados palacios custodiados por guardias suizos que llevan siglos en un mismo rumbo de "témelo". Temeremos todos y todos arderemos, porque por temer, nos dicen que temamos un condón y no un mal reparto de la riqueza. Porque claro, de riqueza esos andan sobrados.

Que ese señor haya sido calificado de "héroe", "santo" o "valiente" me nubla y mucho. ¿Cómo llaman ellos a las 3/4 partes de la población que sobrevive con menos de 1€ al dia? ¿Y a los que rehacen su vida después de un tsunami? Ah si! Es verdad, esos son los pobres, los que se deben acercar a Dios.

(¿Será que nosotros ya estamos cerca?Caray! A ver si va resultar que Dios es el Dinero!)

ya_allati_la_cree
clatwoman

4.4.05

 
Blogger Marcelo Mendez said...

No olvidemos que la auténtica iglesia está en el corazón de todos los creyentes... luchemos por renovar la jerarquía y no dejemos de cultiva nuestro interior.

Un abrazo guapísima

8.4.05

 
Anonymous Anónimo said...

¿ Y dónde quedó Juan XXIII, El Papa bueno, el Papa de los que creeis, el de los que no creemos? Pues quedó en reflexiones como la tuya, que permite que nos entendamos, y unamos fuerzas, y sobre todo nos respetemos.
Kusipi dice: "Yo sinceramente creo que el compromiso con la humanidad puede vivirse a través de muchos nombres, y de muchas tradiciones"
Después de esto, nada se puede añadir. Me quito el sombrero.

Firmado, un ateo

9.4.05

 
Anonymous Anónimo said...

Nadie dijo que ser cristiano fuera facil...

5.5.05

 

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